Teresa Prado está a punto de cumplir los cincuenta y, a su edad, considera que debe tener de todo menos vergüenza.
Amelia Ordóñez es la dueña del Melis, un local de ambiente donde su simpatía atrae a las mujeres y su hermetismo las aleja.
Toñi Pizarro es renegona, malhumorada y atractiva, una mezcla explosiva para una mujer extremadamente sensible.
Isi Mateo es una soñadora de carácter demasiado noble y reprimido a la que pronto le saltarán los plomos.
Paula Carro apenas ha pasado los cuarenta, lo que la convierte en la más joven del grupo además de la más enamoradiza.
Las cinco se conocen en un club de lectura en el que hablan de todo menos de los libros que están leyendo.
Aparentemente no tienen nada en común unas con otras, pero las une la edad, la soltería y las ganas de encontrar pareja, lo que las convierte en un grupo que ellas mismas nombrarán como el de las cuarentonas desbocadas.
